El universo acaba de regalarnos un nuevo espectáculo cósmico. Astrónomos de todo el mundo están observando con detalle al cometa 3I/ATLAS, un objeto que proviene de fuera de nuestro sistema solar y que se ha convertido en el tercer visitante interestelar jamás detectado, después de ʻOumuamua (2017) y 2I/Borisov (2019).
El hallazgo fue realizado en julio de 2025 por el telescopio ATLAS, ubicado en el norte de Chile, y desde entonces se ha convertido en uno de los fenómenos astronómicos más seguidos del año.
🔭 Un visitante de otra estrella
Los astrónomos confirmaron su origen interestelar al analizar la trayectoria hiperbólica del cometa, que demuestra que no está ligado gravitacionalmente al Sol.
Esto significa que 3I/ATLAS viene de otro sistema estelar y, tras su breve paso por el nuestro, volverá a perderse en el espacio interestelar.
“Cada objeto de este tipo es una cápsula del tiempo, una muestra de los materiales que existen más allá de nuestro vecindario solar”, explicó la astrónoma estadounidense Karen Meech, especialista en cuerpos interestelares.
🌌 Cómo es el cometa 3I/ATLAS
Las primeras observaciones indican que el cometa posee una coma brillante y una cola visible, a diferencia de ʻOumuamua —que tenía una forma alargada y carecía de actividad típica de cometa—.
Su brillo sugiere la presencia de hielo y polvo volátil, lo que lo convierte en un objeto ideal para estudiar cómo se forman los sistemas planetarios en otras estrellas.
El cometa se está desplazando actualmente a más de 60 kilómetros por segundo, una velocidad suficiente para atravesar el sistema solar en cuestión de meses.
🧪 Un laboratorio natural para la ciencia
Instituciones como la NASA, la ESA y observatorios de Japón, Europa y Sudamérica están colaborando para seguir su recorrido.
Gracias a su composición activa, 3I/ATLAS podría ofrecer pistas sobre la química del espacio interestelar, los procesos de formación planetaria y el intercambio de materiales entre sistemas estelares.
Además, se está evaluando la posibilidad de observarlo con el telescopio espacial James Webb, lo que permitiría obtener datos espectroscópicos de altísima precisión sobre sus elementos.
🌠 Un fenómeno que no volveremos a ver
Debido a su trayectoria y velocidad, el cometa 3I/ATLAS no regresará jamás al sistema solar.
Su paso representa una oportunidad única para la astronomía moderna y un recordatorio de que nuestro sistema planetario no está aislado, sino que forma parte de una red cósmica mucho más vasta.
📌 En resumen:
El cometa 3I/ATLAS es un nuevo mensajero interestelar que viaja a través del sistema solar.
Su descubrimiento refuerza la idea de que existen millones de cuerpos errantes vagando entre las estrellas, y cada uno de ellos puede ayudarnos a comprender mejor el origen y la diversidad del universo.
